Sinónimos: Retinol
La vitamina A (1) juega un papel central en la visión, piel, genes, crecimiento y sistema inmune. Es especialmente importante durante las primeras etapas de gestación para el correcto desarrollo embrionario.
En el cuerpo se encuentran activas tres formas distintas de vitamina A: retinol, retinal y ácido retinoico.
Estos son conocidos como retinoides. Las células del cuerpo pueden convertir el retinol y retinal a otras formas activas de vitamina A según sea necesario.
Cada forma de vitamina A desempeña funciones específicas:
- El retinol ayuda en la reproducción y es el mayor medio de transporte de la vitamina.
- El retinal está activo en la visión y es también un intermediario en la conversión de retinol a ácido retinoico.
- El ácido retinoico actúa como una hormona, regulando la diferenciación celular, crecimiento y desarrollo embrionario.
Los alimentos derivados de animales proporcionan retinol en una forma fácilmente digerible y absorbible.
Los alimentos derivados de plantas proveen carotenoides, algunos de los cuales tienen actividad de pro vitamina A.
El cuerpo puede convertir carotenoides como β-caroteno, α-caroteno y β-criptoxantina en vitamina A.
La vitamina A (2) contribuye:
- Al metabolismo normal del hierro, ya que mejora la concentración de hemoglobina.
- Al mantenimiento de las mucosas, la piel y la visión en condiciones normales.
- Al funcionamiento normal del sistema inmunitario debido a que estimula la proliferación de células T o linfoides, mientras que inhibe la proliferación de células B y precursores de estas.
- Al proceso de diferenciación celular.
Las principales fuentes de vitamina A (1,4) son:
- Retinol: Hígado, yema de huevo, mantequilla, leche entera y queso.
- Carotenos:
Verduras: Chiles secos, hojas de chaya, chipilín, zanahorias, quelites, jitomate, miltomate, acelga, espinaca, berros, romeritos, verdolagas, nopales, huauzontles, calabaza amarilla, aguacate.
Frutas: Tejocote, mango, chabacano, melón, mandarina, marañón, plátano macho, ciruela, guayaba, plátano tabasco, mamey, higo, zarzamora, papaya, guanábana.
568 μg ER (6)
1000 μg ER (3)
La carencia provoca una resequedad patológica del ojo, que puede llevar a la xeroftalmía y algunas veces a la queratomalacia y a la ceguera.
También pueden sufrir otros tejidos epiteliales y en la piel no es rara la queratosis folicular. (5)
Referencias bibliográficas: